NOTICIAS

Marina Abramović deberá pagar más de $280 mil en regalías a ex colaborador y pareja Ulay

Marina Abramović deberá pagar más de $280 mil en regalías a ex colaborador y pareja Ulay
Marina Abramović y Ulay. Obra: AAA-AAA (performance RTB, Liege) 1977 (Foto: Colección Pomeranz)

Un tribunal holandés determinó esta semana que la artista de performance Marina Abramović deberá pagar a su ex colaborador Ulay Laysipien -quien es también artista independiente—más de $280 mil dólares por regalías no pagadas por trabajos que ambos realizaron en común durante una década.

“Marina y yo compartimos un periodo de intensa colaboración artística y los trabajos de ese periodo son nuestra propiedad espiritual en conjunto. Yo respeto lo que Marina ha logrado desde entonces y nunca quise esta confrontación. No obstante, me siento obligado a defender mi legado, mis derechos morales como un autor en conjunto, y mi derecho por las regalías acordadas de las ventas de estos trabajos. Espero que ahora podemos hacer la paz al respecto, dejar este caso en el pasado y trabajar juntos para promover nuestro legado artístico compartido”, expresó Ulay sobre la decisión.

De acuerdo a la demanda, Abramović mantuvo para sí las regalías de los trabajos que ambos crearon cuando estaban juntos. Según Ulay, la artista violó los términos de un contrato que ambos firmaron en el 1999, en el que ambos estipularon que los dos artistas compartirían el reconocimientos por los trabajos en cuestión. También se alegó que Abramović solicitó a las galerías que exhibieran las obras bajo su autoría, no le proveyó la información correcta de las ventas de estas obras y sólo le pagó cuatro veces durante el transcurso de 16 años.

Luego del rompimiento de ambos en el 1988, Ulay vendió su archivo físico a Abramović quien accedió a mantenerlo, supervisar la producción de materiales para la venta en la forma de vídeos, fotografías y performances. Todos los fondos obtenidos serían divididos en la siguiente formula: 50% para la galería, 30% a Abramović y 20% para Ulay, según reseñó el periódico The Guardian.

Luego del rompimiento de ambos en 1988, su relación se mantuvo cordial y hubiera continuado así —según Ulay— si Abramović no hubiera interferido con la publicación de su libro de 2014, Whispers: Ulay on Ulay. El libro —que incluía imágenes de sus obras en común— se comenzó a escribir cuando Ulay fue sometido a quimioterapia, luego de un diagnóstico de linfoma. Abramović acordó originalmente dar una entrevista, que fue realizada. No obstante, Abramović solicitó posteriormente, por medio de un abogado, que no se publicara la entrevista ni las fotos de ambos. Por causa de ello, el editor decidió excluir cerca de 28 imágenes del libro, las que se sustituyeron por cuadrados rosados. En ese momento Ulay manifestó sentirse muy herido pues entendió que la acción de Abramović había sido injusta. Según el artista, la falta de reconocimiento promovida por Abramović en las obras de ambos tiene como propósito el borrarlo de la historia del arte.