- El 2026 reúne aniversarios históricos y judiciales clave para denunciar el esquema colonial que afecta a Puerto Rico y otros territorios.
- La opinión disidente en Veneno cuestiona los poderes plenarios del Congreso sobre territorios, abriendo diálogo sobre sus límites constitucionales.
- Organizaciones como Right to Democracy y litigios futuros podrían impulsar cambios legales y visibilidad sobre los derechos de 3.6 millones de ciudadanos territoriales.
El 2026 podría ser un año significativo para la lucha de territorios como Puerto Rico en la lucha contra el esquema colonial que los lacera, según Neil Weare, cofundador del grupo Right to Democracy.
Weare, criado en el territorio de Guam, dijo que hay varios eventos que se concatenan en los próximos meses que permitirán denunciar la situación de lugares como Puerto Rico. Algunos son de naturaleza histórica. Por un lado, se celebran 250 años de la independencia de Estados Unidos y por el otro los 125 años del primero de los llamados “casos insulares”, la doctrina considerada en algunos sectores como racista que trata diferente a los residentes de los estados que a los ciudadanos en los territorios.
“Por un lado todos los hombres son creados iguales (frase paradigmática de la Declaración de Independencia de Estados Unidos de 1776) pero 3.6 millones de ciudadanos todavía son gobernados bajo un esquema colonial”, dijo Weare.
De igual forma, dijo Weare, es importante una opinión disidente en el caso Veneno del Tribunal Supremo de Estados Unidos de la firma del juez Neil Gorsuch, y apoyada por el más veterano de los magistrados del alto foro, Clarence Thomas, que critica la situación política en lugares diferentes a los estados. 24-5191 Veneno v. United States (11/10/2025)
“La opinión levanta cuestionamientos sobre los poderes plenarios del Congreso sobre los territorios”, sostuvo Weare. Veneno es un caso relacionado a una reserva indígena.
«Gorsuch usa un lenguaje muy fuerte, diciendo que la cláusula de territorios no provee para estos poderes plenarios”, reflexionó Weare.
La disidente de 7 páginas comienza indicando que la doctrina de los poderes plenarios nace en el siglo 19, sobre una reserva indígena. «Es una teoría que debería sonrojar (de vergüenza, o blush) a esta corte. No solo esta moción carece de todo fundamento en la Constitución, sino que está enraizada en prejuicios arcaicos», agrega la opinión.
Para Weare, “es el comienzo de una conversación sobre los límites que debe tener el gobierno federal sobre Puerto Rico y otros territorios”, indicó el activista y abogado en entrevista con Microjuris.
Asimismo, Weare es coautor de un libro sobre estos temas que también saldrá publicado en 2026, y en el que lograron incluir por su importancia el caso Veneno, y que busca contribuir al debate jurídico. “Además de que hay un aumento en el escepticismo en otros jueces que hemos visto, es una oportunidad para académicos y abogados litigantes de explorar los desafíos legales de los territorios”, afirmó.
Además de Puerto Rico y Guam, otros territorios que Estados Unidos tiene en condiciones similares son Islas Vírgenes estadounidenses, American Samoa e Islas Marianas del Norte. Se estima que 3.6 millones de ciudadanos estadounidenses viven en estas islas —la inmensa mayoría en Puerto Rico— con menos derechos que los residentes de los Estados Unidos continentales. La otra cofundadora de Right to Democracy es la profesora de Derecho puertorriqueña, Adi Martínez Román.
Asimismo, Right to Democracy pudiera en un futuro cercano estar involucrada en demandas judiciales que busquen cambios en el derecho a través de los tribunales relacionados a los residentes de estas islas. Weare no descartó si alguno de esos casos se vería en las cortes federales de Puerto Rico.
El activista no mostró sorpresa con que parte de los cuestionamientos a los poderes plenarios del Congreso sobre lugares como Puerto Rico provengan del ala más conservadora de Estados Unidos, en parte por su apego a la idea de preservar el texto original de la Constitución. “Una base de esos valores fundamentales es la Declaración de Independencia. No solo son de los 50 estados, sino los territorios. Y hay un esquema colonial en ellos. Creo que esto es una verdadera oportunidad. Hay un reconocimiento en Estados Unidos de que en esos territorios hay una relación colonial real, fuerte, y debe terminar ahora”, añadió.



