El senador por San Juan, Miguel Romero, presentó una medida que permite a entidades del sector privado entrar en acuerdos con el Gobierno de Puerto Rico o los municipios para el desarrollo, construcción y mantenimiento de ciclovías.
El proyecto o Ley de Adopción de Ciclovías, según Romero, “establecería un mecanismo denominado acuerdo de auspicio, mediante el cual el sector privado podría entrar en acuerdos con entidades del gobierno para el mantenimiento de ciclovías existentes”. Estos acuerdos de auspicio, que tendrían una duración de hasta 10 años, renovables a 10 años adicionales, estarían en manos del Departamento de Transportación y Obras Públicas cuando se trate de vías públicas estatales, mientras que los municipios se encargarían los acuerdos en las vías públicas municipales».
“Además de promover que se establezcan la mayor cantidad de espacios para una actividad familiar como es el ciclismo, entendemos que en la medida que hayan más vías para practicar este deporte, se reducen las posibilidad de que ocurran incidentes como aquellos en que la ciclista Mayra Elías resultó gravemente herida tras ser atropellada por un conductor y en otro en que el joven José Ramos Ortiz lamentablemente perdió la vida”.
El senador agregó que, “igualmente, el uso de las bicicletas como un medio de transporte alternativo y eco-amigable ha visto un aumento en tiempos recientes. Y ante el incremento a través de los años de la congestión vehicular en las carreteras principales de Puerto Rico y el deseo de ciudadanos de reducir su huella de carbono en protección del ambiente y la costo-eficiencia de poseer una bicicleta versus un vehículo de motor, cada día son más las personas que prefieren utilizar dicho medio de transporte. A pesar de esto, Puerto Rico se encuentra rezagado en cuanto al desarrollo y construcción de infraestructura vial que provea un espacio seguro para que ciclistas utilicen su medio de transporte de preferencia”. Explicó que, “definitivamente, hay que hacer más, pero este proyecto es una herramienta adicional para facilitar esta actividad. Queremos que los ciclistas puedan salid a la calle en confianza, tranquilos y seguros”.
La medida propuesta por Romero también propone que el trámite y la obtención de permisos para la construcción de ciclovías al amparo de esta ley esté libre de arbitrios, contribuciones o impuestos, tanto estatales como municipales. El auspiciador de una ciclovía bajo esta Ley podría reclamar como donativo la inversión realizada para efectos contributivos.
Además, el auspiciador podría colocar, a intervalos no menores de 300 pies -en la ciclovía-, afiches comunicando que fue adoptada por su entidad. “La medida no conllevaría gastos de fondos públicos, pero lograría que se establezcan estas ciclovías en beneficio de todos. Igualmente, los municipios podrán acogerse a esta Ley para habilitar el mecanismo y sus beneficios dentro de su jurisdicción”, dijo el también presidente de la Comisión de Gobierno del Senado.